La Vida es un Regalo: Gracias María

En ciertas ocasiones, debemos parar, dejar de escribir, borrar lo escrito y continuar.

Hoy, es uno de esos días, donde no quiero dejar pasar la gran pérdida que hemos tenido, que ha tenido no sólo el deporte español y en concreto el mundo del motor, sino de la gran pérdida a la esperanza, lucha, fuerza, que la humanidad, me atrevería a decir, ha sufrido.

Debemos reconocer que hasta 2012 poco o nada sabíamos la gran mayoría sobre ella, hasta que un buen día, saltó la noticia. La primera piloto española a pruebas en la Fórmula 1 había sufrido un gravísimo accidente que hacía peligrar su vida, de hecho, se llegó a temer por la misma.

A partir de aquel 3 de Julio de 2012, gran parte de la atención mediática en el mundo del deporte se centró en esta gran luchadora, que asombraría al mundo por sus ganas de vivir, humildad y esperanzas que albergaba ante la nueva luz de la vida que le sería entregada.

Puede que sufriera grandes secuelas, incluida la pérdida de su ojo derecho. Al principio, como ella misma diría a los médicos, necesitaba sus dos ojos para realizar su trabajo, al igual que los cirujanos necesitaban dos brazos para operar, pese a todo, se sobrepuso, y lo mismo que nosotros no logramos llegar a comprender aquella fuerza, persistencia inusitada, ella así nos la regalaría, pues la verdad, es que a raíz de ese instante María ya no volvería a correr, no volvería a subir a un monoplaza de Fórmula 1, pero lo que sí volvería sería a vivir, pero no sólo para ella, si no por y para aquellos que como ella habrían de seguir luchando tras un grave accidente o enfermedad, ella haría llegar a los más recónditos lugares del mundo que la lucha es tenaz, pero con optimismo, alegría y esperanzas todo se podría ver de un nuevo color, con una nueva óptica, luz, la luz de la vida.

Muchos sabréis de mi gran admiración hacia aquellas personas, honradas de corazón, humildes, luchadoras, con un objetivo, y que gracias a su tenacidad, para tratar de cumplir sus sueños, así procedían, y, sin lugar a dudas, ella era una de esas personas. Como tantos otros todo lo que sé y he podido llegar a saber sobre ella es a través de los distintos medios de comunicación. El frescor con el que te llegaba sus ganas de vivir, su increíble felicidad, su gran alegría y fascinación por la vida, te hacían sentir un ser extraño, y a veces incluso no llegabas a comprender el fondo de todo lo que quería decir, la profundidad de ese mensaje lleno de esperanzas, de sueños vividos y por vivir…

No te das cuenta del esplendor de lo maravillosa que es esa persona, de la admiración mayor aún si cabe que puedes llegar a tener hacia ese discurso, hacia esa humanidad, hasta que un buen día, en un solo instante, todo se pierde, se difumina en las sombras y tras poco más de un año de constante lucha por vivir, de discursos llenos de esperanzas, todo se pierde, se borra, y te preguntas, ¿por qué? ¿Por qué después de tanto luchar, de tan malos ratos vividos, una persona como ella debe desaparecer de este modo tan trágico y sin sentido? ¿Qué sentido tiene todo esto? ¿Qué sentido tiene haber nadado tanto para morir no en la orilla, si no en tierra, en esta bendita tierra?

Son preguntas crudas, crueles, sin respuestas.

Ayer se dejó de contar la historia de una increíble luchadora, ayer se acabó su vida, y un pedacito de aquellos que la vimos y seguimos en su caminar en este año, se nos fue con ella, pero lo que sin duda ayer empezó fue su leyenda.

El lunes tendremos su regalo de despedida, un regalo que tiene por título, “La Vida es un Regalo”, que nos recuerda el misterio implícito que día a día miles de millones de seres humanos, y seres vivos en general, tenemos con el significado que conlleva el término vida.

¿Qué es la vida? ¿Qué somos para ella? De Villota demostró que frente a todos los problemas estamos aquí, tu lector y yo escritor contándonos, interaccionando uno con otro, un momento, una reflexión de la que podrás estar más o menos de acuerdo, pero lo que sin lugar a dudas quiero decirte, es eso mismo, estas ahí leyendo, y eso, es lo más importante, vivir, por, para nosotros y los demás, como ella misma hizo a lo largo de estos 15 meses de lucha constante, y hoy en el recuerdo, nos queda su sonrisa, su aliento por seguir adelante, por caminar pese a los obstáculos que nos encontremos, frente a las caídas que tengamos, nos levantaremos, no dejemos nunca que la desidia y el desaliento manche nuestra vida llena de luz, caminemos, luchemos por nuestros sueños, luchemos por nuestra vida aquí, hoy y ahora, no lo dejemos para mañana, porque, como diría el gran Andrés Montes, “La Vida puede ser Maravillosa”, démonos una oportunidad, démosles a la vida su oportunidad.

           “Siento que la vida es un ratito, un regalo, que no hay que tomársela muy en serio porque ni siquiera nuestra vida es nuestra”. 

María de Villota Comba (Madrid, 13 de enero de 1980 - Sevilla, 11 de octubre de 2013) piloto de automovilismo española. Desde marzo de 2013 encargada de la Categoría de Monoplazas de la Comisión de Pilotos de la FIA, junto a Karun Chandhok y Nigel Mansell.